La oración de Nehemías
La nación de Israel y el pueblo judío estaba en un estado desesperado. Sus naciones habían sido destruidas. La cuidad de Jerusalén había sido conquistado por los Babilonios, y el templo de Solomon había sido destruido. Nehemías oye del estado de Jerusalén. Él vivía en Susa.la cuidad capital de Persia. Su cuerpo estaba en Persia, pero su corazón y intereses estaban en Jerusalén - a 800 millas de alli! . Nehemías tenia el corazón que dice en los Salmos 137:5-6 que dice, “Si me olvidare de ti, oh Jerusalén, Pierda mi diestra su destreza. Mi lengua se pegue a mi paladar, si de ti no me acordare; si no enalteciere a Jerusalén como preferente asunto de mi alegría.” Si Jerusalén era importante para Dios, entonces lo era para Nehemías también. La noticia que el recibe no es muy agradable que digamos. “El remanente están en gran mal y afrenta y el muro de Jerusalén derribado, y sus puertas quemadas a fuego.” (vs 3)
Una ciudad sin muros era una ciudad completamente abierta y vulnerable a sus enemigos. Ellos no tenían protección y eran sin defensa. El Cristiano sin la armadura de Dios para protegerlo es también vulnerable a los ataques de Satanás.
Se sentía agobiado, preocupado . “Cuando oi estas palabras me senté y lloré e hice duelo por algunos días, y ayuné y oré delante del Dios de los cielos.” (vs 4) La reacción de Nehemías es extrema. Se le van las fuerzas y se tiene que sentar. Ellos estaban en Jerusalén y el había estado en exilio por más de 20 años. Que tanto les pudiera conocer? Nehemías hizo duelo por algunos días y ayuno y oro. - No concluía después de “algunos días”- sino que apenas comenzaba. No se quejo, no dijo 'encuentran a alguien mas para hacer el trabajo'. Cada uno de nosotros podemos hacer lo que hizo Nehemías - orar e intensamente buscar a Dios en nuestra situación. Dios va hacer algo, cualquiera gran obra de Dios comienza cuando Dios hace una gran obra en alguien.
Dios estaba por hacer algo grande con Nehemías, pero primero tenia que hacer algo en la vida de Nehemías. Dios preparo esto desde antemano. Dios vio la necesidad desde el cielo, pero poco se iba a hacer hasta que el hombre correcto también sintiera la necesidad. Y ahora, através de Nehemías, Dios va ser algo grande y va cumplir la necesidad. Dios quiere hacer algo grande en nuestra comunidad. Solo esta esperando que miremos la necesidad y permitimos que El haga algo grande através de nosotros,
Nehemías también tenía un claro entendimiento de quien ayunaba y oraba -al Dios del cielo. Hay muchos “dioses” en que confían la gente. Pero hay uno solo que puede cumplir las necesidades!
La oración de Nehemías (vs 5-11) . Él viene a Dios con humildad. (Vs 5-7)
Cuando Nehemías dice “Este atento tu oído y abiertos tus ojos para oír la oración de tu siervo...” esta reflejando su completa dependencia en el Señor. Solo Dios puede ayudarme y si solo Dios oyere entonces El me ayudaría. Pero porque no nos oye a veces? Por dos razones. Porque pecamos y porque pedimos mal.
Nehemías viene a Dios mirando las promesas de Dios. Que poderosa manera de venir a Dios! Para recordarle sus promesas! Nehemías esta diciendo, “Señor, tu le hiciste una promesa a Moisés y a esta nación, y ahora te ruego que cumplas con tu palabra.” Vs 8 dice, “Acuérdate ahora de la palabra que le diste a Moisés tu siervo, diciendo, “Si vosotros pecareis, yo os dispersare por los pueblos; 9 pero si os volviereis a mi, y guardareis mis mandamientos, y los pusiereis por obra, de alli os recogeré, y os traeré al lugar que escogí para hacer habitar allí mi nombre.” Esto, sin duda, es el secreto de poder en oración. Rogar las promesas de Dios. Seguro, cada uno de nosotros hemos sido frustrados cuando nuestros niños dicen, “Pero Papa, lo prometiste!” Pero nuestro Padre celestial se deleita en ello. Era una promesa con una condición. Tendrían que volver a Dios en arrepentimiento.
Finalmente, Nehemías ora con un corazón dispuesto de hacer algo. Vs 11, “Te ruego, oh Jehová, este ahora atento tu oído a la oración de tu siervo, y a la oración de tus siervos, quienes desean reverenciar tu nombre, concede ahora buen éxito a tu siervo, y dale gracia delante de aquel varón. Porque yo servia de copero al rey.” Nehemías iba hacer algo con los muros de Jerusalén pero sabía que no podía hacer nada sin la intervención de Dios. Esto es la oración de un hombre de acción.
Cuando nuestra fe nos mueve, nada es imposible! El ora, “Usa a tu siervo para ser las cosas mejores.”
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