viernes, 3 de junio de 2011

Construyendo Grandes Relaciones V




"En esto conocemos lo que es el amor: en que Jesucristo entregó su vida por nosotros. Así también nosotros debemos entregar la vida por nuestros hermanos. Si alguien que posee bienes materiales ve que su hermano está pasando necesidad, y no tiene compasión de él, ¿cómo se puede decir que el amor de Dios habita en él? Queridos hijos, no amemos de palabra ni de labios para afuera, sino con hechos y de verdad." 1 Juan 3:16-18 (NIV)

¡Guau! Este pasaje es tan claro. A veces resulta más fácil aceptar aquellos textos de la Escritura que son más oscuros. Porque en esos casos puedo torcer su significado para satisfacer mi comodidad. Pero usted no puede hacer eso con este pasaje. El modelo para el amor es obvio: “la muerte de Jesús en la cruz”. La más pura ilustración de amor es el centro de nuestra fe. No podemos ni siquiera empezar a entender qué es el amor si no miramos a Jesús y Su sacrificio. Entonces somos desafiados a amarnos de la misma manera que Jesús nos amó.


Somos retados a entregar nuestras vidas a los demás. Ese concepto es un poco abrumador y poco común. ¿Cómo puedo practicar esta actitud hacia el mundo? Juan parece anticiparse a nuestra inquietud y nos da una aplicación práctica de esto. No muchos de nosotros tenemos la oportunidad diaria de entregar nuestras vidas a otra persona, pero todos somos constantemente confrontados con la oportunidad de ayudar a un hermano en necesidad. Y a menudo es específicamente una necesidad material.

Dios es Espíritu pero Él se identifica con nosotros y nos enseña de modos concretos. Él nos recuerda que el amor no se trata de palabras resonantes y lindas sino de satisfacer necesidades. El verdadero amor siempre producirá acciones. ¿Qué debemos hacer frente a un pasaje como este? ¡Póngalo en práctica! Todos tenemos alguna posesión material (bien, podría ser dinero en efectivo, como también podría ser algo en nuestra casa); eso podría satisfacer la necesidad inmediata de alguien que conocemos. Tome un minuto para pensar sobre una necesidad tangible de una persona específica que usted conoce. ¡Entonces muéstrele su amor actuando inmediatamente! Haga hoy mismo una lista de las personas a quienes podría ayudar y ore a Dios que le dé la oportunidad de concretarlo. No se demore…!


No hay comentarios: