El segundo piso, es la etapa donde comenzamos a trabajar para discipular a los nuevos hermanos y desafiarlos a continuar con su crecimiento espiritual. Esto lo hacemos a través de un programa de crecimiento donde el nuevo hermano toma la decisión de convertirse verdaderamente en miembro de la iglesia haciendo un compromiso con el cuerpo de Cristo para servirlo a través de sus dones.
El Nuevo Testamento pone bien clara la forma en que Dios quiere que todo Cristiano crezca y avance hacia una madurez espiritual. La Biblia dice en el libro de Efesios 4:14-15, “…para que ya no seamos niños fluctuantes,…sino que siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todo, en Aquél que es la cabeza, esto es, Cristo”.
La voluntad de Dios para todo Cristiano es, que crezcamos. Dios quiere que seamos todo lo que Él desea. Él quiere que desarrollemos nuestra madurez espiritual. Ahora, la pregunta es ¿Cómo?. ¿Cómo ayudamos a los creyentes de nuestra Iglesia a crecer en comunión con Dios, con otros creyentes y en número de discípulos?.
Necesitamos entender que el crecimiento espiritual empieza con un compromiso; es un proceso gradual; no sucede de un día para otro, sino que involucra el desarrollo de hábitos, la decisión de servir al Señor y ser ministrados.
Entendiendo la naturaleza del compromiso (Pacto de Madurez)
Primero, si queremos ayudar a la gente a madurar espiritualmente, tenemos que ayudarles a hacer un compromiso espiritual, porque todo crecimiento empieza con un compromiso. Es por esto que debemos animar a los miembros a pasar al tercer piso firmando el “Pacto de Madurez”.
A) Nos convertimos en aquello que nos comprometemos a ser.
Nada pasa hasta que alguien decide crecer, porque el crecimiento es intencional. Ahora, ayudar a la gente a hacer un compromiso espiritual, puede ser una de las cosas más importantes que hagamos como iglesia, porque todos llegamos a ser aquello a lo que nos comprometemos. Por ésta razón es muy importante el escoger los compromisos muy cuidadosamente, porque estos determinarán nuestro destino. No sólo aquí en la tierra, sino también en la eternidad.
B) La Iglesia es conocida por sus compromisos.
De la misma manera en que los compromisos espirituales determinan quienes somos, la Iglesia también es conocida por sus compromisos. Es por esto que tenemos que ser una Iglesia que se maneja con propósito, en donde los compromisos son los tres propósitos de la Iglesia del Nuevo Testamento.
Crecen en comunión con Dios.
Crecer en comunión los unos con los otros.
Crecer en número de discípulos y multiplicarnos.
C) Tenemos que pedir a la gente que se comprometa.
¿Cuál es la mejor forma de pedir a la gente que haga un compromiso cuando tratamos con ellos?
Ser específicos
Debemos pedir claramente. Digámosle a la gente exactamente lo que esperamos o queremos que hagan. Describámosles el compromiso.
Mostrar los beneficios
Y después, debemos explícales los beneficios de hacer ese compromiso espiritual. Cuando hacemos estas cosas, encontraremos que es mucho más fácil ayudar a la gente a crecer en sus compromisos con el Señor.
D) Cuanto más grande es el compromiso, mayor es la respuesta.
Entre más grande es el compromiso que pidamos, más grande será la respuesta. A veces tenemos miedo de que se nos vaya la gente si les pedimos que hagan un compromiso. Pero a la gente no le molesta. De hecho, ellos responden a un gran compromiso si hay un gran propósito detrás de él. En IBLHOS “Pueblo Nuevo tenemos, “un gran compromiso con el Gran Mandamiento y a la Gran Comisión. Esto hará crecer una gran Iglesia y un gran Cristiano. La gente responde a una visión cuando son desafiados a hacer un compromiso. Crecer en comunión con Dios y los unos con los otros, tiene que ver con el Gran Mandamiento y Crecer en número de discípulos tiene que ver con la Gran Comisión.
E) La gente quiere comprometerse con algo que les de Significando
Ellos quieren comprometerse con una gran causa. Dios nos diseño de esa manera. Y así es como lo vamos a hacer: Construiremos grandes compromisos desafiando a la gente a que lo hagan tomando pasos específicos de crecimiento espiritual.
F) Debemos construir compromiso por compromiso.
Debemos hacer de grandes compromisos muchos pequeños pasos. Así la gente puede avanzar paso por paso y nosotros les ayudaremos a crecer gradualmente en su compromiso. Hasta que no les enseñemos a crecer en su compromiso, no los podremos ver crecer mucho espiritualmente; porque compromiso es el principio del crecimiento espiritual.
Tenemos que ayudar a la gente a desarrollar hábitos espirituales. (Didaktikós)
La segunda cosa que necesitamos hacer para su crecimiento, es ayudarlos a desarrollar hábitos de crecimiento espiritual. Esto lo hacemos a través de un curso que denominamos Didaktikós.
Contenido del discipulado:
1.Cómo iniciar un nuevo estilo de vida.
2.Cómo invertir tiempo en Dios.
3.Cómo ser enseñados por Dios.
4.Cómo hacer discípulos.
5.Cómo tutelar a los que recibieron a Cristo.
6.Cómo vivir en comunidad.
7.Qué debemos saber sobre la Palabra de Dios.
8.La autoridad de la Biblia.
9.Cómo interpretar la Biblia.
10. Cómo sacar un mejor provecho al estudio de la Biblia.
11. Cómo discernir las verdades bíblicas.
12. Beneficios y condiciones de la oración.
13. El poder de la oración unida.
14. Oración y ayuno
Segundo retiro de ministración (Avanzando hacia la Madurez).
Este retiro está orientado a poder superar las barreras espirituales que impiden a los cristianos avanzar hacia la madurez.
Son aparentemente problemas comunes y corrientes pero en el fondo son problemas espirituales.
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