Orando con fe...

"...Pida con fe, no dudando nada; porque el que duda es semejante a la onda del mar, que es arrastrada por el viento y echada de una parte a otra. No piense, pues, quien tal haga, que recibira cosa alguna del Señor." Stgo.1:6-7

Este es el Señor Jesucristo el que está hablando. Y dijo: si permanecéis en mi y mis palabras permanecen en vosotros pediréis lo que queréis y se os concederá, esta es la confianza que tenemos que si pedimos cualquier cosa de acuerdo a su voluntad, su palabra, el nos oye y si sabemos que nos oye sabemos que ya tenemos las peticiones que hemos hecho. Son promesas grandes y hermosas.
Dios le dijo a Jeremías clama a mi y yo te responderé y te mostraré cosas grandes y ocultas que tu no conoces, Dios es un Dios que oye el clamor de su pueblo, y el responderá a la oración.
Sabemos que su misericordia permanece para siempre. Sabemos que el oye nuestro clamor, sabemos que ha prometido responder a nuestra oración y muchas veces cuando no oigamos nada de Dios y todos nos desaniman, arrodíllese y adórele.
Hay poder en la oración, Jesús clamaba Abba padre, en el jardín de Getsemaní, es el clamor de un bebe diciendo papi, papi, papi, estaba tan cargado, sudando grandes gotas de sangre, decía Abba, Abba padre, y a veces tenemos que orar así. No sabemos mas que hacer parece, que nos vamos a morir que no vamos a sobrevivir, y clamamos, Abba padre, Abba padre, Abba padre.
Continuemos orando hasta que Dios nos responda, hasta que los muros caigan, hasta que las cosas cambien.
Pero oremos con fe, creyendo que vamos a recibir de Dios aquello que le estamos pidiendo.